Lo he utilizado en una paciente joven que desde hace tres semanas viene a la consulta con dolores en un omoplato, con el tratamiento que le vengo haciendo obtiene una ligera mejoría, pero se quedó estancada; siempre le quedaba algo de dolor, nunca conseguí que se le quitara del todo. Cuando yo tuve el Acupresor “LOQI” y la Acupirámide Bioenergética en la consulta y vino esta persona a su terapia semanal, le expliqué que la trataría con estos nuevos elementos recientemente incorporado por mí. Le pareció bien. Primero se introdujo en la Acupirámide y luego pasó a la camilla para los masajes como de costumbre. Normalmente al masajear la zona, se le pone roja, en esta ocasión ocurrió lo mismo pero al aplicarle el Acupresor como complemento a la terapia, esta rojez desapareció automáticamente, me quedé sorprendido. Volví a darle otro masaje y por mucho que frotaba, no se volvía a poner roja la zona. A los cuatro días la llamé para ver el resultado y como estaba, me contesto: Estoy contentísima, no me ha vuelto a doler después de lo del otro día. Esto es una buena novedad, pues en las otras ocasiones, después del tratamiento, además de que se iba con algo de dolor, durante el día y con algunas posturas, le dolía más.
Paso a comentar lo que le ha ocurrido a mi Señora: Desde hace tiempo, padece de soriasis en las piernas, tiene su tratamiento que sigue sistemáticamente, en estos días ha estado entrando en la Acupirámide y cual ha sido la sorpresa, que la soriasis se le está secando poco a poco.
Paso a preguntarle ¿Estará contento con los instrumentales? Responde: Pues sí. Estoy contento.